sábado, octubre 07, 2006

Tapia

Estóicos como tapias. Así son. Sólidos en lo que dicen, aunque no se la crean ni ellos mismos. Simples, pero su composición es inexplicable, porque el fondo resulta ser algo más que cemento, piedras y cadenas para que no se caigan con el primer temblor. O con el primer terremoto.
Porque a estas murallas los golpes no les han sido nada débiles, cada uno de esos les ha volado mas de algún pedacito y las ha descascarado un poco. Se están cayendo, pero intentan mantenerse firme, porque si una se derrumba, el efecto dominó se produce instantáneamente y todo se viene abajo.
En cambio los árboles son un poco menos resistentes y desgraciadamente "mi" hombre pequeño salió más árbol. Es más sensible, más aferrado a la tierra y si llueve mucho (agua, lágrimas) se pudre. Los pájaros lo picotean y anidan en él. Salió más árbol.
Me siento integrada a esa masa amorfa de seres extraños sin importarme si es o no recíproco. Pero a kilómetros se nota que no pertenezco a ese mundo, porque no soy pared ni árbol.

No hay comentarios.: