Con un disco de Silvio Rodriguez de mi padre,
con un disco de Spiritualised (o como se escriba),
con un libro de Santiago Gamboa "Perder es cuestión de Método"
y con algo que mamonamente se le dice corazón,
que se lo llevó
haciéndolo mil pedazos.
Y aquí una sin lo que te bombea la sangre y te da pulso.
Y aquí una sin vida.