lunes, marzo 19, 2007

Cosas que pasan y de donde vengo... la continuación

Pasa que entré a la universidad.
Me cachorrearon asquerosamente y ya me hice de unos pocos amigos (conocidos o como quieran decirles).
Ya probé el transantiago en las mañanas y todavía no me corren mano (afortunadamente). Me he ido como una sardina en el metro, compartiendo olores que no sabía que existían. En todo caso, la clave está en colocarse cerca de lo asientos, ahí te vas más sueltito...
Me picaron tres pulgas o una en tres lugares diferentes.
Esto pasó cuando ayudé a mi primo y hermana a hacerle las curaciones a Mordelón (el gato que apareció por generación espontánea debajo de mi cama). Resulta que el muy poco gato intentando saltar del techo al suelo (imagino) se enterró uno de los fierros de la reja en la pata. Ahora se le ve el hueso. Hay que echarle povidona, ponerle una gasa y darle una pastilla que nunca se traga.
Me puse un vestido que no usaba hace un tiempo.
Me quedé dormida en cálculo y me inscribí a un taller de danza.
Me pisaron mis deditos con jauainas (chilensis) y vi como una chica vestida de escolar besaba a su novio vestido de escolar y veian a una guagua en una ecogarfia (no vestida de escolar) haciéndole cariñito a la guatita de la chica vestida de escolar.

Me hice cariñito en MI guatita, que estaba llena de pizza y sin ropa de escolar.


Lo próximo será más corto de lo habitual para que mis queridos lectores ("ninguno", "nadie" y "por aquí pasé pero no leí") no se aburran tanto.

En cuanto a mi madre; sí, ese día le terminé haciendo el bendito masaje para que dejara de molestarme.
No recuerdo hace cuanto tiempo madre se puso a limpiar el baño (no es que nunca lo haga, sino que esta vez fue algo especial); quería dejarlo blanco y brillante. Al parecer ninguno de los limpiadores comunes la satisfizo así que usó uno que le pareció correcto.
Estuvo al rededor de dos horas en el baño o más y no dejaba que alguien entrara al baño "porque está muy hediondo"- decía- así que teníamos que aguantarnos o ir a la casa del vecino a pesar de tener nuestro baño.
Salió y se puso a coser con la máquina. Tosía como tubercolosa y no podía hablar. El baño estaba como con una nablina y al entrar picaban los ojos y la garganta.
-Mamá... qué echaste?- le preguntábamos con mi hermana.
- No sé... soda cáustica parece...- y se ponía a toser como condenada mientras le salían lágrimas por los ojos.
Después de años y años de experiencia con mi hermana hemos aprendido a desconfiar de madre. Es común que nos mienta (hay un par de historias notables, pero serán para otro día). A pesar de que la soda es ácido no produce ese efecto en un baño... por mucho que se refriegue la tina y el váter :P
Fui a ver qué era mientras mi hermana hacía cariñito en la espalda de madre, que no paraba de toser. Intentó hablar y no pudo. Parece que era grave.
Debajo del lava-platos estaba el culpable, o al menos, la cosa que le hizo eso a madre, aunque si nos ponemos a pensar se lo hizo ella misma porque la weaita no se dio vuelta sola en el baño intentando limpiarlo.
Era ácido muriático. No sé de dónde mierda lo sacó (porque esas cosas hay que mantenerlas lejos de madre) y no sé cómo no vio la calavera dibujada fuera del envase, pero la cosa es que cuando vimos el frasco en el baño mientras ella lo usaba (no vimos la etiqueta, por supuesto, pensamos que usaba cloro o cualquier otra cosa normal) quedaba más de la mitad y ahora apenas quedaban como dos dedos de los míos (o sea, muy flacos). Todo el resto estaba repartido desintegrando la mugre de nuestro baño (junto con nuestro baño) y los pulmones de madre.
Llamamos a un fono de una farmacia para preguntar que tan grave era y nos dijeron que mejor la lleváramos a la posta o podría perder sus cuerdas vocales.
Unos tíos la llevaron al Barros Luco donde la tuvieron con oxígeno por como 7 horas. Los médicos creyeron que se había intentado suicidar porque NADIE LIMPIA EL BAÑO CON ÁCIDO MURIÁTICO, es como la típica escusa del suicida frutrado. Mi familia intentó explicarle que madre era un caso especial; ni los pacos ni los doctores les creyeron y comenzaron a pensar en un homicidio frutrado.
No importa, nosotros sabemos la verdad.
De todas formas, el baño quedó blanco y reluciente.


No me salió corto.

1 comentario:

Regulus dijo...

Que fuerte lo de tu madre o.o
Te mande un mail =P
chau

P.D: me carga que, cada vez q te posteo, tengo q hacer eso de escribir unas letras hueonas como de confirmacion...para que tanto color???